También conocida como nutrición personalizada, es una ciencia que distingue qué fracción de nuestros genes pueden modificarse con lo que comemos.
En este sentido, estudia la forma en que los alimentos u otros factores ambientales influyen en el funcionamiento de nuestros genes, de forma directa. En particular, lo relacionado con tratamientos o prevención de enfermedades.
Por tanto, dependiendo de los genes, se logra saber qué se puede consumir y qué no. Es por ello que supone potenciales beneficios a nuestra vida y, en el siguiente post conocerás algunos de estos.
Tabla de contenidos
¿Para qué nos sirve la nutrigenética?
Puede que la mayor ventaja es que permite examinar las necesidades individuales en función del perfil genético. Es decir, es una dieta que toma en cuenta todas las características de una persona.
Además, sirve para:
Ayuda a prevenir enfermedades
La nutrigenética permite una mejor comprensión de cómo pueden afectar ciertos alimentos a los genes. De esta manera, sirve para lograr un equilibrio nutricional, por lo que reduce el riesgo de padecer afecciones de origen metabólico.
De modo que, mejora la salud cardiovascular, ayuda al equilibrio de los procesos inflamatorios y fomenta una vejez saludable.
También puede ayudar a:
- Conservar la salud ósea.
- Nivelar la microbiota intestinal.
- Mejorar la sensibilidad a la insulina.
- Modular el metabolismo de las grasas.
Contribuye a crear hábitos saludables
Esto se debe a que ayuda a determinar qué alimentos deberíamos consumir y para ello, se basa en nuestro ADN. Por ende, se pueden evitar enfermedades en un futuro.
Pero, esto no significa que una persona deje de lado sus preferencias, solo que se debe hacer con una dieta saludable.
Ofrece una mejor calidad de vida
La razón es porque atiende las necesidades específicas del organismo. Al mismo tiempo, la nutrigenética proporciona pistas para actuar y contrarrestar las tendencias genéticas negativas.
Por otro lado, es una dieta nutricional que va acorde con el estado físico de una persona en cada momento. Al igual que, se ajustan de un modo más natural a las prácticas habituales y a los hábitos de cada individuo.
Posible aumento del rendimiento físico
Se cree que la nutrigenética puede influir de forma positiva en la productividad deportiva.
Y es que, al examinar los genes de un deportista, los planes de nutrición se pueden personalizar.
De esta manera, sabrá qué alimentos son favorables de acuerdo a su estado físico y cuáles se recomiendan no consumir para lograr su máximo rendimiento. Al mismo tiempo, supone aumentar los niveles de concentración.
Sin embargo, no hay nada que respalde dicha teoría.
En resumen, esta ciencia puede indicar qué alimentos procesan mejor tu organismo para una optimización máxima.
Cabe resaltar que, las evidencias más sólidas que hay en la actualidad, se enfocan en las relacionadas con el metabolismo. Sin embargo, cada vez es más notable la relevancia de la nutrición personalizada para el bienestar.
Pese a que aún está en proceso y requiere de más estudios, se presume que ayudará en un futuro a la prevención y la cura de enfermedades crónicas.