Una infección de garganta es de las molestias y afecciones que con más frecuencia suceden a las personas. Presentándose con inflamación, irritación, presencia de pus y dolor dependiendo de la gravedad de la afectación.
Cuando es leve se puede tratar en casa con remedios naturales, dado que el cuerpo también combatirá contra la infección. Pero si es fuerte, lo más recomendable es acudir a un médico cuanto antes, dado que es muy probable que se necesite consumir antibióticos.
A continuación para que tengas varias opciones para combatirla y aliviar el dolor te daremos algunos remedios que te puedes aplicar, así será más ameno su proceso y recuperación.
Cucharada de miel
Una cucharada de miel es una excelente opción para aliviar los dolores de garganta, por sus componentes antisépticos que combaten contra los microbios y otros elementos que causan esta infección. Dado esto, sirve para tratamientos preventivos y cuando ya se padece la infección.
El tratamiento consiste en tomar una cucharada de miel y colocarla en la parte posterior de la boca para que poco a poco se vaya diluyendo, de esta manera la consumirás lentamente y aprovechar sus efectos.
Bicarbonato de sodio y limón
Este tratamiento no es el más llamativo de todos, dado que su sabor y olor no es para nada agradable, pero ayudará mucho a contrarrestar las afecciones relacionadas con la infección de garganta.
Para consumirlo prepara agua con limón sin azúcar y le agregas un poco de bicarbonato de sodio, luego tómalo con calma y repite esta operación dos veces al día. Cada componente tiene fuertes propiedades antisépticas y ayudan a eliminar las bacterias que mantienen la infección de garganta.
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Vinagre de manzana
El vinagre de manzana también posee excelentes propiedades antibacterianas que atacaran de forma rápida y directa a los causantes de la infección y además ayudan a suavizar el dolor de la zona.
La función del vinagre de manzana está relacionada con el pH, ya que este disminuye y genera un ambiente nada óptimo para las bacterias, frenando su crecimiento. Para aprovecharlo es recomendable consumir una cucharadita lentamente.
Gárgaras de agua tibia con sal
Este tratamiento es de los más eficaces y fáciles de realizar, debido a que solo necesitarás agua y sal para llevarlo a cabo. Lo primero que debes hacer es hervir una taza de agua y agregarle media cucharadita de sal para que se disuelva.
Luego deja reposar hasta que esté tibia y efectúa gárgaras con esta agua sin tragarla. Repite hasta que se haya acabado la preparación y es recomendable ejecutar este proceso al levantarse y antes de acostarse.
El agua tibia ayudará a calmar el dolor de la garganta, mientras que la sal con sus propiedades antisépticas combatirá los microorganismos que se encuentran en la zona afectada. Por eso es una combinación perfecta.
Infusión de regaliz
El regaliz es una planta que tiene fuertes propiedades antiinflamatorias y expectorantes, por lo que ayuda mucho contra los dolores en la garganta causados por la infección, incluso cuando como consecuencia te hayas quedado sin voz.
Para consumir esta planta y recurrir a sus beneficios, solo es necesario hacer una infusión y tomarla lo más caliente que puedas soportar sin quemarte.
Gárgaras de salvia
Como último remedio contra la infección de garganta tenemos a la salvia. Esta planta tiene sustancias que ayudan a calmar la irritación de la garganta, mejorando las molestias durante la inyección.
Para realizar las gárgaras realiza una infusión y deja que se entibie, luego procede a pasarla por tu garganta sin consumirla.
Remedios naturales para mejorar
Los remedios naturales son muy útiles para combatir la mayoría de las afecciones, incluso cuando estás bajo un tratamiento de antibióticos, pueden acelerar la recuperación de la infección de garganta, no te olvides de usarlos.
