Perder peso es una de las grandes obsesiones de las personas. En casos extremos, hay quienes ponen en riesgo su salud en busca del peso y la figura perfecta. Esto puede generar la aparición de diferentes condiciones como la cetosis, cada vez más habitual en el mundo de la nutrición.
Se trata de una condición común en quienes siguen dietas rigurosas para perder peso de forma rápida. Generalmente, son personas que buscan adelgazar en poco tiempo y sin considerar aspectos médicos ni físicos importantes.
Es por esta razón que evitar la cetosis resulta fundamental. Sin embargo, antes es necesario conocer de qué se trata.
¿Qué es la cetosis?
Seguramente en algún momento oíste hablar de las dietas milagrosas, estas que prometen una pérdida de peso rápida y efectiva. Aunque parece una propuesta atractiva, este tipo de regímenes alimenticios pueden resultar altamente peligrosos.
Una de las principales enfermedades que pueden surgir de ellos es la cetosis. Esta condición se basa en un cambio metabólico a causa de dietas incorrectas, especialmente si se trata de una alimentación alta en proteína.
Su aparición se da con el aumento de los cuerpos cetónicos en la sangre. Esto a causa de un déficit nutricional por la ausencia de carbohidratos. En estado de cetosis, el cuerpo es capaz de quemar tanto grasas como las reservas de la misma, lo que permite la acelerada pérdida de peso.
Las llamadas dietas cetogénicas son ampliamente controversiales debido a las consecuencias y riesgos que pueden generar su implementación.
Consecuencias de la cetosis
Si te planteas seguir una dieta cetogénica es necesario que antes te informes sobre ella. Especialmente las consecuencias o efectos que esta tendrá sobre tu organismo y que de seguro no conoces. Algunos de ellos son:
Disminuye los niveles de insulina
Los especialistas aseguran que en una dieta de este tipo los niveles de insulina tienden a desplomarse, lo que puede resultar contraproducente para la salud.
La baja insulina produce una liberación de los ácidos grasos del tejido del cuerpo, convirtiéndose en combustible para el funcionamiento de este.
Diferentes molestias y malestar
La “gripe keto” es una de las consecuencias más comunes de esta dieta. Las molestias relacionadas a ello son dolores de cabeza, malestar general, calambres musculares, cansancio, debilidad, entre otros.
Tanto la gripe como los síntomas pueden variar en cuanto a duración, generalmente desaparecen en un par de semanas, mientras que el cuerpo se acostumbra a la ausencia de carbohidratos.
Mal aliento
Otra de las consecuencias desagradables de esta dieta es la presencia de un olor fuerte y desagradable en su aliento. Eso es causado por la acetona, uno de los cuerpos cetónicos que produce el hígado y cuyo olor puede afectar el aliento de quienes siguen este régimen alimenticio.
Estreñimiento
Sobre todo en personas cuya ingesta de fibra no es la adecuada en una dieta keto, el estreñimiento puede resultar común.
Riesgo de coágulos renales
Según algunos especialistas, una dieta alta en grasa puede generar la aparición de piedras en los riñones. Aún más en personas que no se hidratan correctamente.
Problemas cardiovasculares
Aunque no se trata de una consecuencia inmediata, profesionales de la salud aseguran que la cetosis puede comprometer la salud cardiovascular a largo plazo con el aumento del nivel del colesterol.
Si bien no es preciso que aparezcan todas las consecuencias, las dietas cetogénicas pueden resultar perjudiciales para la salud de las personas, si no se llevan a cabo de la forma correcta.
Cómo prevenir la cetosis
Como hemos mencionado, la cetosis es una condición metabólica asociada a una alimentación desequilibrada y a dietas inadecuadas. Es por esta razón que la principal forma de prevenirla es manteniendo una dieta totalmente equilibrada, apoyándose en conocimientos profesionales.
La implementación de dietas por cuenta propia puede resultar perjudicial para la salud. Pues los profesionales especializados son quienes tienen el conocimiento y las herramientas para conducir a una alimentación adecuada a las necesidades nutricionales, físicas y médicas de cualquier persona.
En ese sentido, evita realizar dieta sin consultar antes a un nutricionista. Realizar una dieta cetogénica puede comprometer órganos importantes de tu cuerpo como el riñón, por lo que llevar a cabo un régimen de adelgazamiento equilibrado y acompañarlo de ejercicios moderados puede resultar la mejor alternativa para evitarla.
Finalmente, un error común es obsesionarse con el peso y la apariencia física, recuerda que adelgazar también dependerá de tu estado mental. Por lo que buscar ayuda profesional será siempre la mejor opción.